Para 2015 se calculaba que en Colombia estaba en curso la construcción de 150 proyectos interesados en incorporar aspectos sostenibles, con el fin de disminuir el consumo de agua y luz. El Consejo Colombiano de la Construcción Sostenible, Cccs, ha asegurado que cuando las edificaciones se piensan desde el principio con este propósito, se puede llegar hasta un 70% de ahorro en energía y un 90% en agua. Un ejemplo real de esta perspectiva son las sucursales sostenibles que ha desarrollado Bancolombia en los dos últimos años en los que, gracias a diversas estrategias, han ahorrado en energía el consumo equivalente a 1150 apartamentos con 3 personas habitando y el agua que llenaría 25 piscinas olímpicas. Vea ‘Construcciones que favorecen el cuidado del medio ambiente’ Por ejemplo, en la sucursal Carvajal en Bogotá se tomaron medidas como: el reciclaje de agua para sanitarios mediante uso del agua lluvia, la optimización de la energía con equipos de alta eficiencia que comparativamente consumen hasta el 56% de consumo de energía y el 45% del consumo de agua de una sucursal tradicional. Además, su mantenimiento electromecánico ha sido menor a otras sucursales de las mismas características, con un ahorro del 40%. El sector hotelero es otro de los que ha aportado al ahorro de agua y energía en el país, pues más de 60 establecimientos se han certificado con la norma NTS 002, que determina requisitos de sostenibilidad. Pero las tareas trascienden las estructuras, pues en el día a día de una oficina es indispensable el aporte de los colaboradores y empleados. Por ejemplo, Bancolombia estableció una cultura organizacional de uso racional de la energía en puestos de trabajo y que se pueda replicar en su círculo cercano de los cempleados, como el hogar y los amigos. Para eso es importante la capacitación y difusión de la información con actividades sencillas que se convierten en un gran paso. Por ejemplo, ¿cómo contribuir al ahorro en las actividades diarias? Desconectar los aparatos electrónicos, pues siguen consumiendo un tercio de energía cuando están conectados. No se deben conectar varios aparatos en una misma toma, pues se puede generar un corto. Reciclar basuras, reutilizar los productos (vasos desechables, mezcladores, bolsas, papel) y, aprovechar la luz natural. Al aplicar estas sencillas tareas de ahorro en la oficina y en el hogar, se disminuye la necesidad del consumo y, por ende, se utilizan menos recursos para lograrlo, lo que impacta positivamente nuestro entorno. , ELESPECTADOR.COM – Medio Ambiente,
Constructor de Paz y Empresario Gabriel Ricardo Morales Fallon
Gabriel Morales Fallon trabajando por un mundo sostenible