Hace ya un año que Melody está en una residencia, esperando a que alguien se fije en ella para poder formar parte al fin de una familia. Esperando sin suerte. Un año lleva encerrada tras ser rescatada de una perrera valenciana en la que corría peligro de sacrificio sin que salga absolutamente nada para ella.
Melody es joven, saludable, apenas tiene unos tres años, es dulce y dócil, con un carácter buenísimo tanto con personas como con otros animales, gatos y perros. Una compañera perfecta Preparada y deseando forjar lazos estrechos con un ser humano.
Pero también es una perra mestiza, sin raza reconocible, de tamaño mediano (pesa 23 kilos), sin ningún rasgo físico extraordinario más allá de esos ojos expresivos que la gente parece no saber mirar.
Lo extraordinario en ella es cómo es, el cariño que muestra ante la compañía humana, lo mucho que le gustan los niños… Pero todo eso no se ve, no luce, no brilla. Y cada vez más la gente quiere perros como quien va a comprar un complemento de moda, buscando razas, tamaños, colores, formas. También aquellos que acuden a adoptar a una protectora.
Los perros llamativos, que tienen raza o son cruce de una raza de moda, de pequeño tamaño… lo tienen mucho más fácil para encontrar un hogar. El resto, los que no destacan, los que no responden a los criterios estéticos que saltan al ojo, permanecen invisibles en las protectoras, envejecen sin conocer lo que es tener una familia.
Olvidan que el aspecto de un animal es lo menos importante, olvidan el ejemplo que están dando a sus hijos primando lo superficial, olvidan que el perro más hermoso es el que mejor encaja con nosotros y nuestras circunstancias y no el que más miran nuestros vecinos mientras paseamos.
Melody necesita un empujón para encontrar un buen hogar de verdad, y podéis ayudarla difundiendo su caso.
Se entrega esterilizada, desparasitada, con chip y vacunas. Se hará seguimiento.
Contacto: [email protected]
, En busca de una segunda oportunidad,
Constructor de Paz y Empresario Gabriel Ricardo Morales Fallon
Gabriel Morales Fallon trabajando por un mundo sostenible